jueves, 3 de abril de 2008

Dicen que tengas cuidado con lo que deseas porque es posible que se cumpla.
Desde hace tiempo deseo que mis tardes estén llenas, no tener que quedarme en casa mirando al techo. Volver a enamorarme. Sentir de nuevo emociones que me hagan recordar los días, que no sean una sucesión de caras conocidas y medias sonrisas, que pase algo, coño! Que me hagan daño para volver a estar triste con motivos.
Hoy pasé por delante de la puerta del bar en el que nos conocimos y he sentido una mezcla de alegría por las senaciones que me trae y de tristeza por no estar con él.
Parece que de momento no tengo nada que temer.

2 comentarios:

alakazaam! dijo...

ME ALEGRA UN HUEVO QUE TODO VAYA TAN DE PUTA MADRE Y QUE NUNCA, REPITO: NUNCA TE PILLE EN CASA

VAYA VIDITA...

Bajo las estrellas... dijo...

Ójala todos nuestros deseos se cumplíeran. A día de hoy estoy esperando que uno en especial se cumpla.
Ah¡ y también dicen que cuando menos te lo esperas ocurre¡
1beso¡